• Los zapatos y accesorios están elaborados con materias primas delicadas, naturales y de gran calidad. La autenticidad con la que cuentan hace que muchas veces presenten variaciones en sus tonalidades, característica que les permite ser productos únicos e irrepetibles.
• Siempre es recomendable limpiar el calzado luego de haberlo utilizado así como también dejarlo secar un día del sudor natural del pie.
• En el caso de derrames de líquidos sobre el calzado se debe inmediatamente absorber el fluido con un paño seco y limpio. Luego, pasar una tela absorbente y dejar secar naturalmente sin ser expuesto a ningún tipo de calor natural (sol) o artificial (electrodomésticos). La exposición indebida del mismo a una fuente de calor podría ocasionar que el cuero o las suelas se resequen.
Cueros
Limpiar el zapato con un paño seco para eliminar los excedentes de polvo.
Colocar una crema incolora para cueros y dejar secar.
Pulir la superficie con un cepillo de cerda suave.
Gamuzas y Nobuck
Utilizar un protector especifico para gamuzas, que impermeabilice el calzado, ya que ambos materiales son sensibles al agua.
Evitar el roce con prendas que tienden a perder color.
Charol
Mantener limpio con un cepillo suave o un paño.
No utilizar ningun tipo de limpiador o crema.
Es importante recordar que la superficie de charol es sensible a los rayones. Al ser un material pulido y brillante, las arrugas por el uso serán más visibles que en otros cueros.
· Los zapatos nuevos mantendrán su buen aspecto durante más tiempo si se le dedica un tiempo a su limpieza y protección.
· Una de las recomendaciones principales es la elección del zapato para el uso que se le quiere dar.
· Los zapatos realizados en materiales delicados, deben ser usados ocasionalmente y en actividades o lugares que no corran riesgos.
· Los días de lluvia debemos elegir zapatos especiales de lluvia, ya que ningún calzado de cuero está preparado para tal uso. En la medida de lo posible debe evitarse la utilización de zapatos con suela de cuero en días lluviosos o entornos muy húmedos, ya que la misma podría absorber humedad y deteriorarse. En caso de exposición al agua se deben realizar los procedimientos indicados anteriormente para evitar lesiones en capelladas y suelas.
· Desanuda los cordones antes de calzarse o descalzarse. No pises el contrafuerte o el talón, ya que esto puede ocasionar el debilitamiento del mismo.
· Al realizar procedimientos de limpieza, asegúrate de sacar los cordones.
· Los zapatos con suela de goma no deben ser mantenidos por tiempos prolongados en desuso dentro de su caja. Se recomienda utilizarlos al menos una vez cada dos meses para evitar que la goma se reseque.